El engranaje del tiempo, un juego travieso, un recuento de los daños, un año sagaz, un tanto alocado y desvergonzado, sexual y juguetón, amoroso y doloroso, aprendí a amar y a perder el corazón, a jugar con el corazón sin perder la cabeza, a sentir unas manos sobre mi piel, el sudor del cuerpo sobre mis sabanas, la lujuria y la pasión, la ternura y la delicia, aprendí a crecer y volar, a descubrir y engañar, a sentirme querido, por la multitud, por la soledad, a reír y llorar, a no verlo a los ojos, a cerrar el corazón, a mentir y sufrir, a evolucionar, a caminar y correr, a vivir sin despertar, a fantasear en el aire y en la noche. Aprendí a sentir y arriesgarme, a vivir en el límite, a pelear y ser fuerte, a impulsar y provocar, a seducir y enamorar, a dejar pasar, a olvidar, a odiar con todo el amor. Aprendí a respirar en la brisa, en el fuego y en el agua. El alba todo calma, el tiempo todo cura. Conocí el aroma de la piel al despertar, el sabor de los labios en el fuego de la noche, conocí las líneas de la cama y de la aurora, la mirada del amor, y también su espalda, su luz en la noche y la obscuridad en la soledad, conocí la ausencia del tiempo, del calor y del frío, conocí el brillo sincero de una sonrisa, y el adiós doloroso de un suspiro, promesas inagotables y sarcásticas, conocí la cobardía y el coraje, el verdor de la mente masculina y la rapidez de un cuarto de hotel, conocí la complicidad de una palmera y de un par de puertas, conocí las mentiras de una sabana o quizá de mis piernas. Conocí los hilos de la marioneta, a veces dulces. Conocí la vida entera en un segundo, la pasión explosiva del alma y el dolor de una lágrima. Aprendí a poner el mundo al revés, y a veces de lado, aprendí recobrar mi propia existencia, a olvidar la vergüenza en el baño y en la brisa, aprendí a correr sin mirar atrás.

Aprendí a amar y no dejaré de hacerlo.

10 complices cínicos

  1. Mond on 5 de enero de 2008, 16:20

    Mientras sigas aprendiendo, seguirás logrando vivir, mientras sigas escribiendo lo que vives, seguirás sacando lágrimas de mis ojos... de esas que son de alegría, de esas que hacen que el corazón se salte un latido, de esas de orgullo, de honor porque eres mi amigo... eres parte de mi.

    Quiérote mucho, mucho.

     
  2. Tramontana on 6 de enero de 2008, 17:18

    "a odiar con todo el amor" que buena frase.

     
  3. Mond on 6 de enero de 2008, 19:03

    Testing, testing my new pic... created, of course, by you.

     
  4. ®øЮïgõ on 6 de enero de 2008, 19:05

    it looks awesome!!

     
  5. Gerardo Mariscal on 9 de enero de 2008, 16:33

    Pues si que aprendiste mucho¡ Con una sola Vez basta¡ Abrazos Mister¡

     
  6. Ingrid on 9 de enero de 2008, 16:37

    Oiga usted y ¿la segunda parte? Ha sido un éxito, creo que nos la merecemos, ¿no?

    Besitos

     
  7. vanto y vanchi on 9 de enero de 2008, 17:41

    Amén!!

    Te dejo besos húmedos y guiños reverenciales por las buenas letras.

     
  8. Unknown on 10 de enero de 2008, 13:48

    Saludines ... !!
    eso caray es vivir, disfrutar este hermoso regalo que se nos entrega cada dia al despertar, hacer las cosas que queremos, disfrutar momentos que se nos regalan y crear momentos inolvidables con las personas que tenemos a nuestro alrededor y aun en soledad vivir la vida es algo maravilloso... muchas, pero muchas felicidades por disfrutar la vida... !
    un abrazo desde mexico d.f.

     
  9. Viriz on 11 de enero de 2008, 23:54

    La vida es aprender, el día que dejes de aprender posiblemente ya no estes aqui. Me quedo con esa frase..." Al alba todo calma, el tiempo todo cura" true true.

    Besos y que sigas aprendiendo ;-)

     
  10. elsa on 16 de febrero de 2008, 23:28

    Buen texto. ¡Felicidades!
    Pero ¿es real?. Si es así debes de ser muy joven. Espera a que llegue la plenitud de la madurez(un pariente mío decía que a los hombres sólo les viene el juicio hacia la mitad de la vida si viviesen cien años) y ya me contarás que quedó de las hormonas.
    El "amor" , mi querido Rodrigo, no es más que un espejismo químico en el que los hombres y las mujeres aprenden , falsamente, a mirarse y ven la imagen distorsionada por los alquimistas de las palabras que sois sus defensores, los garndes inventores del cine y de la literatura , cuando no lo había, el cine. Lo siento, pero no me creo nada de la película, de la magia de ese cine. ¡Todo hormonas!
    Cuando los griegos se hacían viejos, para seguir amando a sus efebos, tomaban pócimas. El efecto o el recuerdo de las hormonas engancha.
    Aún así ¡chapeau! por el texto.
    No creas que estoy en contra del amor. Estoy harta, simplemente de tanto azúcar.
    Un saludo del otro lado del charco.